Ni mio, ni tuya.

Es momento de dejar de pelear esas guerras que no nos corresponden. Yo no soy tuya, ni él es mio. No por ese motivo vamos a terminar juntos. Él es mi amigo, no el tuyo. Ella es tu amiga, y me odia. Y aún así ninguno va a estar comiendo pay de limón y helado de frutilla. No sé el por qué de tu odio injustificado dirigido a él, y la renuencia a mi persona de ella para conmigo.Las guerras se manifestaron para buscar nuevamente paz en algún lugar determinado, no lo que están creando con niñerías ahora. En fin... "Estoy tan contenta porque hoy he encontrado a mis amigos".

Aprovechar

Pasar el tiempo, perder el tiempo, aprovecharlo y verlo cambiar. Cuándo estamos todos reunidos no nos importa esa ínfima cantidad de horas que nos dan para estar juntos. Lágrimas caídas, sonrisas robadas, carcajadas compartidas, golpes recibidos, ilusiones asimiladas. Todo es un conjunto, hilos unidos en un solo punto.

San Valentín.

Se encontraban las jóvenes parejas desconsoladas, no podían ni tenían el permiso pertinente para que sea concedido su deseo de unirse en matrimonio para afirmar el amor que se profesaban. Se creía que los soldados eran más audaces sirviendo en el campo de batalla si no se tenían su vida ligada a una esposa. En aquella época, un sacerdote decide unir a estos hombres y mujeres a escondidas, rompiendo las leyes de la supremacía romana. Así mismo, fue llamado por el emperador, preso y ejecutado el 14 de febrero, terminando así con su martirio.
El momento anterior a su muerte, le envío una carta a una muchacha de la cual se había enamorado cuando lo mantuvieron encarcelado. Fue una carta de despedida que firmó: "de tu Valentín"

¿Amor?

¿Amor? Tks... Maldito y repugnante sentimiento que rebaja a una persona a ser un individuo sin decisión propia. ¿Libertad? ¿El amor te da libertad? Te comprime, exprime toda esa esencia tuya hasta que solo queda la dependencia por alguien más. ¡Vamos! No seas una mente ingenua. ¿Amor? Sí, claro, por favor.

Basta

¡Basta! No es necesario que me mortifiques por no querer seguir tus pasos. Nuestro tiempo pasó. No podemos seguir susurrando aquellas palabras cariñosas. ¡BASTA! Cambiamos los dos, tomamos rumbos diferentes, es doloroso mantenerte cautivo en mis brazos, sabiendo que pronto te irás. ¿Lloras? No, es solo tu orgullo herido al perder a tu juguete predilecto. Siempre lo supe, nomas no quería abrir los ojos y observar la verdad. Lo último que puedo decirte, mejor dicho repetirte es... basta.

Sin magia.

No creer en la magia, no creer en el amor. Pasa por el sencillo motivo, que algún día te romperán el corazón. ¿Acaso ya ocurrió? ¿Me echas la culpa a mi por tu decisión? ¿Irónico no? Me mientes, y la culpa la tengo yo.

Nombre de Mujer

Y él, lloró y secó sus lágrimas con el dorso de su mano, por qué la mitad de su indeciso corazón, tiene nombre de mujer.